Crisis en la industria nacional
Récord de importaciones: el 75% de la ropa que se vende en shoppings es extranjera

En el primer trimestre de 2025, el ingreso de ropa importada alcanzó niveles históricos.
El consumo de indumentaria de origen extranjero superó por primera vez al de producción local en los principales canales de comercialización del país. Según datos de la Fundación ProTejer, el 75% de la ropa vendida en shoppings proviene del exterior. En total, los textiles importados representan el 67% del consumo total nacional.
Durante el primer trimestre de 2025, las importaciones de ropa crecieron un 86% interanual en volumen, mientras que los textiles para el hogar aumentaron un 109%, ambos alcanzando máximos históricos. La expansión fue tal que los aeropuertos se vieron obligados a ampliar su infraestructura para absorber la creciente demanda de compras vía courier, vinculadas al comercio electrónico.
Subfacturación y precios bajos: otra amenaza para la industria
ProTejer advirtió sobre una posible subfacturación de las operaciones, al observar que, si bien las cantidades importadas se duplicaron, los valores en dólares subieron en una proporción mucho menor. “Por ejemplo, en el primer trimestre de 2025 los tejidos de punto llegaron al país a un precio FOB promedio un 45% inferior al registrado entre 2015 y 2024”, alertaron desde la entidad.
Esta situación, agregaron, se da en un contexto de eliminación de controles en Aduana y de los valores criterio, lo que debilita aún más a la industria nacional, que opera en condiciones desfavorables frente a productos importados de bajo costo y muchas veces con dumping.
Puede interesarte
Impacto en el empleo y la producción local
Desde ProTejer señalaron que este fenómeno “no solo evidencia la presión externa que enfrenta actualmente la industria textil, sino también un proceso sostenido de debilitamiento estructural del entramado productivo”. El resultado directo es el cierre de empresas, la pérdida de empleo calificado y de eslabones clave dentro de la cadena de valor.
La fundación también remarcó que el actual modelo económico desincentiva la inversión futura y profundiza la dependencia externa, erosionando el desarrollo tecnológico alcanzado por el sector en los últimos años.