Posibles aumentos
Naftas y gasoil: Petroleras analizan incrementos

Ante la devaluación del peso argentino, las compañías petroleras consideran aumentar los precios de naftas y gasoil
La reciente devaluación del peso argentino ha generado reverberaciones en todos los sectores económicos del país, y uno de los ámbitos que ha sentido un impacto significativo es el de los combustibles. Ante esta realidad, las principales compañías petroleras se encuentran en un proceso de evaluación seria para determinar si aumentan los precios de las naftas y el gasoil en todo el territorio nacional, como medida para mitigar los efectos adversos de la devaluación en la economía local. A pesar de la complejidad de la situación, estas empresas están considerando la posibilidad de aplicar un incremento que podría rondar el 20%, si bien todavía están deliberando sobre la viabilidad de realizarlo en uno o dos tramos distintos. Además, se está debatiendo la posibilidad de mantener conversaciones con el Gobierno antes de tomar decisiones definitivas.
Las principales empresas petroleras ya han implementado aumentos del 20% en los canales mayoristas, lo que sugiere la posibilidad inminente de un aumento similar en las estaciones de servicio de todo el país. Esto marcaría el segundo incremento en el mismo mes, dado que el 1 de agosto se puso en marcha un aumento promedio del 4,5%, que representó el último tramo del acuerdo de Precios Justos que las compañías petroleras tenían con el Gobierno.
Desde el ámbito gubernamental, el equipo económico del país ha reconocido públicamente el impacto de la devaluación en los costos de los combustibles, así como en los servicios de electricidad y gas. Se espera que en los próximos días se realicen reuniones con el objetivo de abordar este impacto y explorar soluciones que eviten la necesidad de incrementar los subsidios estatales. En lo que respecta al sector de las naftas, se está contemplando la posibilidad de alcanzar un nuevo acuerdo, ya que el acuerdo anterior venció el 15 de agosto. Sin embargo, en este sector se advierte que el desfase entre los precios al público y la inflación ya era notable antes de la devaluación, y la situación actual dificulta aún más mantener los precios actuales.
El último aumento de precios en los combustibles tuvo lugar hace apenas dos semanas. El precio de la nafta súper ha acumulado un incremento del 41,68% desde principios de 2023, aunque aún se encuentra por debajo de la acumulación de la inflación proyectada para el mismo período.
Alejandro Lew, CEO de YPF, la principal empresa petrolera en Argentina, había anticipado previamente que los precios de los combustibles podrían verse afectados después de las elecciones primarias. Lew destacó que una posible estrategia sería aumentar los precios para contrarrestar la devaluación gradual del peso, señalando que los precios actuales de la compañía están aproximadamente un 10% por debajo de la cotización del dólar a fines de 2022, y que esta brecha se agravaría aún más con un aumento en el precio internacional del crudo.
Actores relevantes en la industria petrolera recalcan que, desde noviembre de 2022, cuando se iniciaron aumentos con límites del 4% y 4,5% en el marco del acuerdo de Precios Justos, los precios en las estaciones de servicio han aumentado a la mitad de la tasa de inflación en un período de ocho meses. La abrupta devaluación que siguió a las elecciones primarias ha exacerbado esta brecha y ha generado una presión adicional sobre los precios de los combustibles.
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En la red de estaciones de servicio de YPF, una de las principales compañías del sector, los precios actuales son los siguientes:
Nafta súper: $213,80
Nafta premium: $274,42
Gasoil: $229,69
Gasoil premium: $313,50
La coyuntura actual plantea un desafío económico considerable tanto para las petroleras como para el Gobierno argentino. La búsqueda de un equilibrio entre los precios de los combustibles, la inflación y el impacto en el bolsillo de los ciudadanos es un delicado ejercicio que requiere decisiones fundamentadas y medidas colaborativas. El panorama económico en Argentina continúa evolucionando, y será fundamental seguir de cerca los acontecimientos en el sector energético en los próximos meses.