La UTA amenaza con un paro de micros de larga distancia
Así lo advirtió el gremio de choferes de colectivos de larga distancia anoche luego de que fracasaron las negociaciones salariales con los empresarios. Piden suba del 40% y denuncian que la cámara demora la firma de la paritaria para "sacar más subsidios y compensaciones" estatales.
Fracasaron nuevamente las negociaciones salariales entre la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y la cámara empresaria de colectivos de larga distancia (Celadi) y los choferes de micro amenazan con una huelga en el inicio de las vacaciones de invierno.
"Los empresarios son unos sinvergüenzas que nos faltan el respeto y nos quieren usar para cubrir sus costos. Si esto sigue así corre peligro el servicio en vacaciones de invierno", avisó Roberto Fernández, secretario general de UTA. El dirigente alegó que la cámara empresaria de micros de larga distancia (Celadi) demora la firma de la paritaria con el propósito de "sacar más subsidios y compensaciones" estatales.
La paritaria permanece sin resolución desde principios de año, más allá de que el Gobierno aceptó aumentar el desembolso de fondos públicos en las empresas, según informó el diario Ambito Financiero.
Desde el Ministerio de Transporte les ofrecieron a las compañías aumentar en $20 millones los desembolsos que realiza cada mes como sostén salarial. En total, cada mes las empresas reciben hasta ahora $115 millones a pesar de ser un sector sin subsidios directos. Además, desde el año pasado el Estado les compensa a los dueños de micros por tres ítems: la competencia en algunas rutas con Aerolíneas Argentinas; los pasajes que están obligados a bonificarles a los discapacitados, y un aporte de $1.500 por cada chofer.
La UTA pretende aplicar en larga distancia el mismo acuerdo que cerró para los colectiveros de Capital Federal y las provincias: es decir, una suba salarial de más del 40% retroactiva a enero y con vigencia hasta mitad de 2016, a través de un primer ajuste del 27,8% y el resto desde principios de año.
Si bien existe acuerdo sobre este esquema en general, en la audiencia del jueves en el Ministerio de Trabajo la UTA y Celadi no lograron acordar la mecánica del aumento. Mientras el gremio reclamó incorporar al salario de manera inmediata los $1.500 que aporta el Gobierno desde enero y hacer todo el arreglo remunerativo, la cámara patronal ofreció mantener los pagos como sumas fijas (es decir, sin tributar los aportes legales) al menos hasta septiembre próximo.
En ese punto, Fernández aseguró que los empresarios pretenden servirse de los desembolsos estatales para cubrir sus costos y al mismo tiempo ahorrarse de pagar los aportes patronales correspondientes. El sindicato busca llegar, el año que viene, a un salario básico cercano a los $15.000, cuando en la actualidad ese piso es de 10.095 pesos más el sostén de $1.500 por parte del Gobierno. El convenio en el segmento de larga distancia involucra a unos 20.000 choferes de todo el país.