Incertidumbre en el horizonte
Combustibles podrían aumentar más del 7% a partir del 1 de mayo
Según un decreto firmado por el presidente Javier Milei, el próximo mes debería incrementarse un impuesto cuyo impacto traería alzas en la nafta y en el gasoil.
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El próximo mes podría traer consigo un nuevo golpe al bolsillo de los argentinos, ya que se espera un aumento en los precios de los combustibles que podría superar el 7%. Según un decreto firmado por el presidente Javier Milei, se prevé un incremento en el impuesto a los combustibles, lo que inevitablemente impactaría en los precios de la nafta y el gasoil.
El cronograma de aumentos establecido por el gobierno señala como fecha clave el 1° de mayo, cuando se aplicaría un incremento del 53% en el impuesto a los combustibles, según lo estipulado en el mencionado decreto. Esto se traduciría en un aumento del 8% en Ciudad de Buenos Aires y del 7% en Córdoba, según estimaciones del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF).
Guillermo Lego, gerente de la cámara CECHA, calcula que este aumento se traduciría en un incremento del 7,3% en la nafta súper, del 5,98% en la nafta premium y del 4,7% en el gasoil.
La posibilidad de evitar estos aumentos parece depender únicamente de una acción gubernamental en sentido contrario.
Este incremento impositivo es parte de un proceso de regularización de los incrementos remanentes que no se aplicaron durante la gestión anterior. De hecho, el impuesto había permanecido congelado durante 10 trimestres consecutivos hasta octubre de 2023.
Sin embargo, estos aumentos podrían tener un impacto significativo en el consumo interno. Desde diciembre hasta comienzos de abril, las ventas de combustibles experimentaron un desplome del 17%, según datos de la Cecha. El aumento de los precios de los combustibles, que se duplicaron después de la devaluación de diciembre, ha hecho que el valor en Argentina se equipare al de los países vecinos, lo que desincentiva la compra local.
Este escenario también ha cambiado los hábitos de consumo, con una caída del 22,6% en la demanda de nafta premium, mientras que aumenta la preferencia por la opción más económica.
Ante este panorama, los argentinos podrían enfrentarse a un nuevo desafío económico a partir del próximo mes, con precios de combustibles que podrían impactar aún más en su poder adquisitivo y en los hábitos de consumo.
