Revirtiendo la tendencia
Aumento histórico en la producción de soja y desafíos en el cultivo de maíz y trigo
La Bolsa de Comercio de Rosario estimó que durante la campaña actual se producirán 48 millones de toneladas.
La producción de soja se prevé que alcance niveles impresionantes durante la campaña actual, superando las sombrías cifras del ciclo anterior. Un reciente informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) revela que se anticipa una cosecha de alrededor de 48 millones de toneladas de soja, en marcado contraste con las escasas 20 millones de toneladas registradas en el ciclo 2022/23, que se posicionaron como el peor resultado en términos de producción del siglo.
En un giro sorprendente, la superficie destinada al cultivo de soja está en camino de romper una tendencia a la baja que se ha mantenido durante nueve años consecutivos. Las estimaciones iniciales pronostican que se sembrarán aproximadamente 17 millones de hectáreas de soja, lo que representa un notable incremento interanual del 6,2%.
La BCR señala que este cambio positivo marca un punto de inflexión en la industria, ya que la superficie dedicada a la soja había experimentado una disminución constante en los últimos años. Pasó de 20,25 millones de hectáreas en la campaña 2014/15 a 15,97 millones en el ciclo anterior. Este declive del 21% en la última década se atribuye a múltiples factores, que van desde problemas de malezas resistentes hasta limitaciones genéticas que afectan el potencial productivo en comparación con el maíz.
Según la BCR, la soja ha evolucionado para convertirse en una alternativa viable cuando las condiciones no favorecen la siembra de maíz. A pesar de la histórica falta de recursos financieros y las adversidades climáticas, como la sequía del año pasado, se espera que una mayor cantidad de hectáreas se destinen al cultivo de soja en la próxima campaña.
Puede interesarte
En lo que respecta al maíz, el informe de la BCR indica que este cultivo ha mantenido una posición más estable en términos de área de siembra. Se prevé que se siembren alrededor de 8,5 millones de hectáreas en el ciclo 2023/24. Factores como un clima favorable para la producción y la disminución en la siembra de trigo en algunas áreas han impulsado a los productores a optar por el maíz en sus rotaciones.
A pesar de las perspectivas positivas, los altos costos de producción, especialmente para aquellos que alquilan tierras, plantean desafíos significativos para el crecimiento del área dedicada al maíz. Si las condiciones continúan siendo estables, se estima una producción cercana a 56 millones de toneladas para el ciclo 2023/24.
En cuanto al trigo, enfrenta dificultades derivadas de la falta de agua en las últimas semanas. A pesar de esto, se espera que se siembren alrededor de 5,4 millones de hectáreas de trigo, con una producción proyectada de aproximadamente 15,6 millones de toneladas.
En resumen, la agricultura en la región está experimentando cambios significativos en la distribución de cultivos, impulsados por factores climáticos, económicos y tecnológicos, que tienen el potencial de redefinir el panorama agrícola en los próximos años.