Vicentín mantendrá cerradas sus plantas
Los trabajadores debían reincorporarse este lunes. Permanecen las negociaciones con los acreedores para salir del cese de pago.
La agroexportadora Vicentín, una de las tres más grandes del país, actualmente en cesación de pagos por una deuda de $ 23.340 millones que no puede pagar “por estrés financiero”, según su propia declaración, comunicó que extiende la guardia pasiva disponible con goce de sueldo.
El personal debía reincorporarse este lunes. Sin embargo, los directivos de la planta anunciaron que continuarán sin actividad hasta el 20 de enero.
Así, con la guardia mínima, el resto de los operarios no concurren a sus puestos de trabajo, pero deben estar a disposición ante cualquier inconveniente.
A su vez, en una reunión de la cual participaron integrantes de la comisión directiva del Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (Soea) anticiparon que habrá un nuevo encuentro el viernes 17 para revisar la situación.
La empresa confirmó lo que ya es de público conocimiento: continúan las negociaciones con los acreedores para encontrar una solución a la situación de estrés financiero y volver a la normalidad lo antes posible. El sindicato permanece en estado de alerta.
Según confirmaron voceros del sector, del total de la deuda, el 80% ($ 18.400 millones) está contraída con el Banco Nación durante la gestión de Gonzalez Fraga.
En tanto, la Bolsa de Rosario intimó a Vicentín a presentar un plan de pagos y la aceitera pidió un poco más de tiempo. Según informes que se divulgaron la semana pasada, el Banco Nación planea oponerse a la reestructuración de la deuda propuesta por el grupo nacido en Avellaneda, al norte de la provincia, y base de sustentación productiva en el Gran Rosario.
Por su parte, la Bolsa de Comercio de Santa Fe emitió una declaración “luego de haber esperado un tiempo prudencial para que la compañía efectúe una oferta a los afectados y en el entendimiento de que la falta de novedades abre un signo de interrogación sobre el futuro de todos los eslabones involucrados de la cadena”.
En la carta que firmó el presidente de la Bolsa, Ulises Mendoza, las cámaras adheridas a la entidad advirtieron que, si no se aplican medidas, habrá “consecuencias en las fuentes de trabajo” y un “negativo correlato social” en el área de influencia y la provincia de Santa Fe, además de un fuerte impacto económico.
Según trascendió, en los últimos días, la firma incumplió con un pago de $ 184 millones a BLD y le pidió a la Cámara Arbitral tiempo hasta el 10 de enero para preparar su plan de pagos.
El banco estatal es su principal acreedor: durante la gestión del anterior gobierno, le prestó $ 18.400 millones que, según fuentes del sistema financiero, Vicentin espera cancelar en abril. La entidad bancaria alega que la compañía agrícola debe vender activos para pagar sus obligaciones antes de buscar alivio. Asimismo, analizan una línea de crédito que le fue otorgada por presuntas irregularidades, destacaron.
Generalizada preocupación
La preocupación y la falta de información se extienden a todos los ámbitos. “El gobierno provincial debería inmiscuirse en el tema y ayudar a buscar soluciones, porque si Vicentín cierra sus puertas desaparece Avellaneda y medio Reconquista”, graficó el presidente del Centro de Corredores de Cereales de Santa Fe, Guillermo Dutto. Según él, la crisis de Vicentín no solo perjudicó a todo el tendal de acreedores sino que también generó una baja de diez dólares en la tonelada de girasol.
“El mercado está casi parado y muy preocupado porque el default se extiende por todos lados (acopios, productores, transportistas, proveedores de insumos, contratistas y corredores); y si todavía no hay problemas mayores es por la buena voluntad de los acreedores que están esperando una solución desde el 4 de diciembre y no tensaron la cuerda dándole tiempo a Vicentín para que resuelva la crisis”, dijo Dutto.
De capitales nacionales, Vicentin es uno de los mayores exportadores de granos y subproductos de la Argentina. De acuerdo con un informe de la consultora Zeni, es la quinta empresa agroexportadora más importante del país. En el primer cuatrimestre de 2019, envió al exterior 2.599.079 toneladas de granos. El grupo de agroalimentos Vicentín es también propietario de la exbodega Sottano y de una importante superficie de viñedos en Mendoza.
Venta
La última venta concretada por Vicentín fue el 2 de diciembre pasado, por el 16,67% de sus acciones (se quedó con el 33,33%) de la planta de biodiesel Renova a la firma Renaisco, afiliada de Glencore Agriculture. Justamente, éste es uno de los grupos empresarios que se menciona como interesado en quedarse con los activos de Vicentín en caso de no resolverse la reestructuración.