“No nos queda otra que participar”
La primera presidenta mujer de la Sociedad Rural de Rosario apeló al compromiso de los productores y a una mejor interacción con los otros eslabones del sector para empezara torcer la historia.
Soledad Aramendi es la primer mujer a cargo de la institución ruralista del sur santafesino en los 126 años de vida. “Es todo un honor, un gran compromiso y una gran responsabilidad estar al frente de la entidad”.
Consultada respecto del género, confesó que “entre hombres y mujeres nos complementamos en nuestra forma de trabajar y de manejarnos, y no hay diferencias. Obviamente que cada uno le da su propia impronta, pero es un trabajo en equipo y eso es lo que vale y hoy en día más que nunca tenemos que sumar a más productores para logra una participación más activa”.
Compromiso activo
Respecto del diagnóstico del ruralismo, apeló a la necesidad de sumar. “A nivel de nuestra institución queremos generar una apertura para invitar a los productores a participar para fortalecer las instituciones. Si nosotros queremos lograr tener una mayor incidencia local provincial o nacional, se necesitan instituciones fuertes, y eso se logra con un número mayor de productores y con una acción activa pro positiva. Si somos unos pocos, la acción es débil, entonces se necesita concientizar e informar para generar esa apertura para poder trabajar activamente tranqueras afuera, porque tranqueras adentro podemos ser los mejores productores, pero si nos faltan las políticas públicas necesarias, con ser los mejore productores no alcanza”.
Hacer más, decirlo mejor
Para Aramendi, uno de los ejes a mejorar es la comunicación entre el campo y la ciudad. “Necesitamos mostrar la verdad que hoy está tergiversada, la verdad respecto de la producción agropecuaria, de las Buenas Prácticas Agrícolas, que la actividad es un polo generador de trabajo, de producción, y de los alimentos de los argentinos”.
En este sentido, apeló a “educar e informar con la verdad: ese es uno de los ejes, y tratar de generar acciones y servicios, informando nuestro accionar local y en Carsfe para que se sientan motivados a una participación activa. Hay mucho por hacer, y ojalá que entre todos podamos dar le una vuelta de rosca y encontrar como vincularnos con toda la cadena para lograr los cambios necesarios”.
Buscarle la vuelta
Según la ruralista, hoy la gente está muy desmotada. “Y la situación crítica del campo y del país hacen que tenemos que accionar de una forma distinta, o sea: hoy tenemos que participar, no nos queda otra, para poder cambiar esto hay que generar una acción distinta por la participación”.
Y agregó que si por los caminos tradicionales no lograron cambios, “debemos empezara a pensar en caminos alternativos, y otros vínculos dentro de la cadena para ver dónde poder incidir uy asociarnos y a trabajar conjuntamente para lograr las políticas que se necesitan”.
Finalmente, reconoció que el campo es uno de los eslabones de la cadena. “Tenemos que aceitar y tener mejores vínculos con los otros para poder asociarnos de una manera más efectiva. Hoy el Gobierno nacional negocia con algunos eslabones de la cadena y no con el campo en sí, por eso tenemos que analizar esos vínculos y esas relaciones”.