Los “manotazos” nacionales que condicionan el ingreso de dólares
Ignacio Mántaras analizó qué pasa en el campo argentino, que podría aprovechar la mayor demanda mundial por la invasión rusa a Ucrania, pero en cambio marcha a una menor siembra ante mercados intervenidos y falta de fertilizantes.
Por Ignacio Hintermeister
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires calculó que el precio del trigo al valor de la próxima cosecha, en enero 2023, supera en 83 dólares por tonelada (+41% interanual) al de la campaña récord anterior que cosechó 21,8 Mtn, y en 100 dólares la tonelada al promedio de las últimas 5 campañas (+56%). Pero la Argentina, que necesita dólares y produce el cereal, marcha a sembrar 10% menos.
“La desconfianza hace perder área de siembra”, explicó a El Litoral Ignacio Mántaras. El presidente de la Sociedad Rural de Santa Fe y secretario de la Confederación de Asociaciones Rurales (Carsfe) señaló que “nadie quiere tener pesos en la mano. El agricultor prefiere tener sus activos bajo tierra por la licuación de la moneda. Vamos a una disminución o la misma área de siembra”.
El día a día de la Argentina señalaba “para octubre-noviembre eso se reflejaba en la demanda de fierros, de camionetas 4×4, pero incluso cuando se mejoró un poco la falta de humedad en los suelos de cara a la próxima campaña…” Mántaras habló con El Litoral sobre el fenómeno de un mundo que demandará más a un país que produciría menos.
¿Se va a sembrar menos trigo en esta campaña en la Argentina
Desde las entidades entendemos que sí. La percepción con los productores es esa, primero por los costos de los fertilizantes -aunque algo han bajado- y aún cuando en la provincia se anunció un convenio con AFA que podría trasladarse a ACA… pero hay un faltante de un 23% según el secretario de Agricultura, Matías Lestani, que es un problema a nivel mundial. Pero creo que tiene más incidencia el riesgo de un gobierno nacional que interviene el mercado del trigo, pegando manotazos en un año que se acerca a las elecciones para cuando sea tiempo de cosechar el trigo
Lo más parecido que tenemos a una máquina de imprimir dólares es el campo. Y con precios internacionales récord para los granos por la invasión rusa a Ucrania, nos damos el lujo de producir menos
Es una paradoja. De hecho los perfiles de humedad se están acomodando; ese era otro problema, pero los perfiles de humedad para la campaña fina se están acomodando. Las condiciones externas y climáticas, de mercados internacionales, están a favor. Lo que deberíamos tener como estrategia país es una definición clara para incrementar un 20 ó un 30% el área de trigo, con la mayor tecnología posible.
Mántaras reconoció “faltante a nivel mundial” de fertilizantes. Pero advirtió que “tiene más incidencia la desconfianza” en el gobierno nacional. Foto: Archivo
-¿Eso se puede hacer de hoy para mañana… si hay fertilizantes
Se puede hacer. Pero se perdió tanta confianza con este gobierno, tanta credibilidad, que aunque anuncien lo que quieran, está la subjetividad de productores que no creen
Para que nos quede claro a los que no estamos cerca de los surcos. ¿Qué pasa si se siembra sin los fertilizantes
No tenés productividad. Un trigo sin fertilizantes se puede hacer, pero no es común y si se hace eso se afecta a la soja de segunda. El fertilizante de “la fina” reditúa en el trigo pero también en la soja de segunda, que es un esquema no solo muy santafesino. Buenos Aires hace lo mismo
Y se empobrece el suelo si no se usan los fertilizantes
Claro, se destruyen los suelos. Ese paradigma se abandonó hace 15 años. El productor lo hace o lo exige a su arrendatario, hay análisis de suelos pos cosecha. Hay criterios instalados
¿Los fertilizantes no están porque no hay dólares para traerlos o porque el costo rompe la ecuación, incluso con estos precios internacionales en suba
Aparentemente, lo que nos dicen los productores, es que un mes atrás la ecuación estaba muy finita por el costo de los fertilizantes aún con los buenos precios. Eso se acomodó; en la provincia de Santa Fe, en la última reunión con el gobernador, se habló de incentivos, de financiar fertilizantes claves para una campaña importante. Eso auguraría una campaña importante de soja de segunda buena. Sin trigo vamos a una soja de primera más fuerte, jugada en ese criterio
Hay una distancia entre productores y el Consejo Agroindustrial Argentino. Una vez más en el Congreso se habla de analizar el proyecto de ley
El proyecto lo anunció el presidente Alberto Fernández en el inicio de sesiones del año pasado. Lleva más de un año desde que ingresó y aún no se conforman las comisiones en la Cámara de Diputados para iniciar el tratamiento… nosotros desde CRA lo analizamos; en lo que es ganadería beneficia a la invernada y no a la cría, en economías regionales tiene cuestiones interesantes. Muchas cosas se podrían haber implementado con simples resoluciones de la Afip; la ley de por sí no es nada si el gobierno cambia las reglas del juego. No tenemos grandes expectativas con la ley, nos encantaría que toda la cadena trabaje con un gobierno serio, con las provincias. Pero eso no se hizo, hubo grandes desarrollos desde la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, Ciara (aceiteras exportadoras)… se perdió una oportunidad y los beneficios son acotados. El gobierno no estaba del todo convencidos aunque Massa lo fogoneaba.
HAY GASOIL, FALTARÁ GAS Y BIODIÉSEL POSTERGADO
Sobre la falta o el sobrecosto de gasoil que se hizo notar días atrás, Mántaras dijo que “el ministro Daniel Costamagna (Producción, Santa Fe) -estuvimos reunidos con él la semana pasada- había tenido conversaciones previas con Energía de la Nación y nos aseguró que iba a haber problemas de gasoil, pero sí de gas con los picos de frío. Se lo han dicho a la industria también”.
Explicó que “con el gasoil se normalizó el tema de las dos semanas en las que tuvimos faltantes y sobreprecios; la campaña se desarrolla con normalidad y el grueso es el consumo para traslado a puertos, donde no hubo grandes inconvenientes. Es cierto que de cada tres estaciones de servicio, una no tiene gasoil. Pero no hay faltantes para transporte de cargas y pasajeros”.
Cuando se le apuntó que el país sigue importando gasoil y la producción de biodiésel continúa planchada, Mántaras agregó que además “no estamos llegando ni siquiera al “corte” del 5% de biodiésel en el gasoil de los surtidores, que esté en un 4,8%.
“Con el biodiésel obviamente hay capacidad ociosa, pero los números tampoco le cierran a las empresas. Se rompió la política de Estado, cambiaron las reglas del juego, (Roberto) Mirabella -cuando era senador nacional- anunció que con la reglamentación de la nueva ley, las dudas que planteamos se solucionarían. Pero eso no ocurrió y el escenario es negativo. Tenemos una gran oportunidad, CRA y la Mesa de Enlace se pronunciaron públicamente”.
“NO NECESITAMOS CRÉDITO SINO PRECIOS”
Respecto del Plan GaNar, con el que el gobierno nacional plantea incrementar 20% la producción ganadera a 2030, Mántaras apuntó tanto a la desconfianza como a créditos que llegan primero a Buenos Aires y que tienen “grifos” a productores locales.
- El plan Ganadero que anunció Julián Domínguez volvió a generar polémicas.
- Lo había anunciado en noviembre. Cuando lo reemplazó a Basterra se tomó algunos días para amigarse con todos, superar un poco el conflicto de exportaciones a China. Conceptualmente coincidimos en producir más… pero los productores no necesitamos créditos, lo que necesitamos es el precio.
- ¿Y eso cómo se lograría?
- El mejor plan ganadero es el precio, y a eso lo da una menor cantidad de intervenciones. En algún punto, si bien las exportaciones no están cerradas, hay alteraciones al mercado. Se lanzaron subsidios, planes financieros… no es lo ideal. Tras aquél anuncio de noviembre hay créditos en el Banco Nación, hicimos trámites desde Carsfe porque no estaban operativos en algunas sucursales de Santa Fe, se activaron en febrero pero todavía no hay un ganadero que haya podido sacar un crédito del plan GanAr. Se anuncian planes pero después hay discrecionalidad y grifos. Sacar un crédito lleva diez meses, hay malas experiencias. Ese esquema no es el ideal. Ahora están los técnicos analizando el nuevo anuncio, puede ser que haya más elementos a favor.
HIDROVÍA EN PROBLEMAS
“Tenemos preocupación por la Hidrovía, lo hemos hablado con el gobernador. Se conformó el órgano de control de gestión; el informe semestral de la Administración General de Puertos (administra en la transición el peaje del canal navegable troncal) tiene a favor que en el semestre, con bajante y poco dragado, hubo superávit. Entraron más buques que salieron con menos carga”.
Mántaras apuntó que “en el gobierno dicen que a fin de año estarán los pliegos para licitar dragado y balizamiento; la verdad es que tenemos dudas con la administración que lleva adelante el intendente de Escobar. Seguiremos con este esquema transitorio mientras el escenario nacional político y económico, no creemos que sea el adecuado para la licitación”.
LA CAMPAÑA EN EL CENTRO-NORTE SANTAFESINO
En la última campaña, la superficie sembrada con trigo en el centro-norte de la provincia de Santa Fe alcanzó las 376.000 ha, un 7,9% por encima de 2020/21, “el segundo mayor registro” desde que el Centro de Estudios y Servicios de la Bolsa de Comercio de Santa Fe elabora el Sistema de Estimaciones Agrícolas.
El informe especial del CES señaló que en 2021/22 “tanto los rendimientos promedio del área como la producción final evidenciaron máximos históricos, ubicándose los rindes en 36,8 qq/ha y la producción final en 1.381.430 toneladas” de trigo.
En esa campaña pasada, el precio a noviembre del cereal fue de US$ 334,5 por tonelada, el mayor valor en nueve años, por debajo de lo que los mercados prometen para enero.
Pero ya el año pasado los insumos registraron aumentos significativos. El CES consignó que la UREA (se produce en base a gas), alcanzó un promedio de US$ /tn 907,0 según datos del Banco Mundial, muy por encima de los US$ 330 a U$ S 350 del inicio de la campaña anterior.
En la última campaña, el margen bruto de los productores del departamento Las Colonias fue de 36,3% o más al norte del 35,0 según la Bolsa de Comercio de Santa Fe. Son números demasiado ajustados para la inversión de la próxima campaña, con más costos y rindes comprometidos de no haber fertilización.
12% tributa por retenciones el trigo, lo mismo que el maíz.
Para la soja el “derecho de exportación” es del 33% y parta el girasol del 7%.
US$ 1409 M se perderían de exportaciones (precios FOB) de trigo por no usar fertilizantes suficientes, si el área sembrada fuera similar a 2021/22, según la Bolsa de Rosario.