Los alimentos suben menos y ayudan a frenar la inflación
En 2016 el rubro se había incrementado 44% anual y en los últimos doce meses aumentó 18%.
La inflación se encamina a cerrar el 2017 con un alza en torno al 20%, por fuera de la banda de 12 a 17% fijada por el Banco Central, pero casi en la mitad del registro del año previo. En esta desaceleración de la inflación, la evolución del precio de los alimentos viene jugando un rol central.
Un informe del IERAL, el instituto de la Fundación Mediterránea, indica que en los últimos 12 meses los precios de los alimentos subieron 18%, tanto en la Ciudad de Buenos Aires como en Córdoba. Ese registro está casi 5 puntos por debajo de la inflación general en el mismo período, que alcanzó el 22%.
El año pasado, los precios de los alimentos se habían movido al mismo ritmo que la inflación general con una tasa del 42%/43% interanual. Con una ponderación del 36% en la composición del Indice de Precios al Consumidor (IPC) que mide el INDEC, el rubro explica poco más de un tercio de la evolución de la inflación.
Por eso, la evolución de alimentos es seguida de cerca por el Gobierno. En mayo, la producción creció 3,9% interanual y revirtió meses de caída. Desde el ministerio de Producción señalaban que ese incremento ayudaría a aumentar la oferta y por ende, a desacelerar la suba de precios.
Dentro del rubro alimentos, la evolución de los precios es heterogénea. Algunos productos han subido por encima de la media: aceites y grasas (entre 26% y 39%); lácteos (entre 26% y 33%) y dulces (entre 23% y 32%), mientras que carnes aumentó 15% y las hortalizas se movieron entre 7 y 12%.
"Lo que mantiene los precios de las carnes por debajo de la tasa de inflación es una situación de mercado holgada entre oferta y demanda", señalan los analistas Juan Manuel Garzón y Federico Wyss. Este año se espera un fuerte crecimiento en la producción, con un excedente para el mercado interno de 86.000 toneladas de carne bovina, 104.000 toneladas de carne aviar y 58.000 toneladas de carne porcina (en este último caso con un componente fuerte de importaciones). La oferta neta consolidada permitiría incrementar el consumo promedio anual per capita en 4,5 kilos, un alza del 4%.
En el caso de los lácteos, las razones de la suba por encima de los valores promedio del rubro responde a que los precios se habían rezagado hacia fines de 2015 y comienzos de 2016 por una oferta excedente y están recuperando terreno en 2017, en una situación de mercado más estrecha.
Efecto dólar
Pero además, en las menores subas de los precios de los alimentos también influyó la desaceleración del ritmo de depreciación del peso. En los últimos 12 meses el dólar subió 15,2%. Según el IERAL, la correlación entre los movimientos de precios de alimentos y el tipo de cambio es del 0,6%.
Para lo que resta del año, "la dinámica de los precios de los alimentos no debería desviarse en forma significativa de la evolución del resto de precios de la economía", indican.
Para este mes, las estimaciones privadas indican que el índice de precios estará en 1,6%, ligeramente pro debajo del 1,7% del mes pasado, pero aún a mucha distancia del 1% mensual que pretende alcanzar el Central para fin de año.