Ganancias que se debaten entre salarios y empresas
La rebaja impositiva beneficiaría a 1,2 millones de trabajadores y jubilados. Pero incrementaría la presión fiscal a empresas y eliminaría una alícuota especial sobre las administradoras de juegos de azar.
Por Ignacio Hintermeister
El proyecto de Sergio Massa para elevar a 150.000 pesos el mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias de trabajadores en relación de dependencia y jubilados (1,2 millones de contribuyentes), tendría como contracaras hasta ahora no muy visibles un incremento de la presión fiscal sobre las empresas y la eliminación de una alícuota especial para empresas que administran juegos de azar.
La iniciativa debe ser analizada en un plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Legislación del Trabajo. Si oficialismo y oposición en la cámara acuerdan la extensión del protocolo para sesiones mixtas, el jueves se produciría el despacho y el martes próximo habría plenario del cuerpo. La rebaja del impuesto sobre el salario tiene amplio apoyo, pero la presión fiscal sobre empresas será materia de discusión.
Massa tiene en claro la necesidad del beneficio a un universo de clase media y criterio independiente, decisivo a la hora del voto, en un año de fuerte puja electoral. El tigrense cierra filas con sectores sindicales de la economía formal, mientras en Casa Rosada le abren paso a la embestida de Cristina contra la Justicia, tratando de blindarse ante las causas de corrupción que afronta junto a sus hijos, criterio que endurece la grieta.
El tigrense busca el crédito político de un proyecto con beneficios retroactivos al 1 de enero; la exención del aguinaldo para el cálculo del gravamen y la inclusión de “concubinos” entre los beneficiarios. Pero la oposición, dispuesta a votar el beneficio a trabajadores y pasivos, ha advertido que la jugada sube la presión fiscal a las empresas -no sólo a las grandes- y se las baja a administradores de casinos y tragamonedas.
Segundas partes…
“No entiendo con qué cara el gobierno dice que sólo le está subiendo los impuestos a las ‘grandes empresas’ (como si fuese bueno) si ahora pasarán a pagar una alícuota récord de 40% las empresas que ganen más de…$ 216.666 pesos mensuales! ¿Es broma lo de ‘grandes empresas’?”, se preguntó Luciano Laspina.
El economista y diputado de Juntos por el Cambio integra la comisión de Presupuesto y analizó la contracara empresaria del proyecto oficialista. Se refirió a la suspensión de una ley sancionada durante el macrismo, que rebajó el gravamen a las empresas, y que se concibe como “compensación a la recaudación” en el proyecto del oficialismo. “
Argentina pasará a tener una alícuota máxima de Ganancias empresarias de las más altas de mundo, si es que ya no es las más alta: 40% versus el 28,1% promedio en Latinoamérica y el 23,7% promedio en los países de la OCDE”, advirtió el legislador en su cuenta de Twitter. “
Argentina tenía (hasta esta nueva ley) la segunda carga tributaria sobre empresas más alta del mundo según el Banco Mundial. Calculo que ahora seremos merecidos campeones. ¡Felicitaciones muchachos! Ni Venezuela se atrevió a tanta voracidad fiscal anti inversión y anti empleo”, ironizó el legislador.
Como si la controversia no fuera suficiente, Carlos Pagni reveló anoche que un proyecto que llegó hace horas a la Cámara de Diputados modifica el artículo 73 de la ley vigente de Ganancias, y omite reponer la cláusula que obliga a las empresas que administran juegos de azar, una alícuota especial de Ganancias de 41,5%.
El “lavagnismo” condiciona
Desde el lavagnismo, el diputado nacional Jorge Sarghini condicionó el apoyo al proyecto de Massa. “Hay que ver la letra chica; el sector privado no admite más presión tributaria. Es necesario incentivar el consumo para reactivar la economía, pero para lograr un crecimiento genuino se necesita más inversión y con esta presión impositiva es difícil que la inversión llegue”.
El bloque Consenso Federal propone “un incremento de 50% en las asignaciones familiares” previstas en la ley 24.714 para “beneficiar a los trabajadores en relación de dependencia cuyos ingresos están por debajo del umbral a partir del cual se encuentran gravados por el impuesto en cuestión”. Así lo exponen en una nota dirigida a la presidencia de Diputados y a la comisión de Presupuesto, que preside Carlos Heller.