Blanqueo laboral y los impuestos de los autos, en la mesa chica
Triaca estuvo en la UIA y los empresarios de las terminales, con Dujovne.
La intersección temática es abrumadora en la Argentina. Al menos, en el mundo de los negocios. Ese centro de gravedad lo ocupan hoy los impuestos y su impacto sobre la competitividad y, por ende, en las inversiones.
En una reunión agendada hace semanas, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca , fue recibido ayer por el Departamento de Política Social de la UIA, que preside Daniel Funes de Rioja. El vicepresidente de la entidad suena -pese a algunas resistencias- como un candidato para reemplazar a Adrián Kaufmann en la presidencia. El otro nombre es Miguel Acevedo (AGD). En la UIA aún no hay consenso.
El encuentro duró una hora y media. Mientras cerca de Triaca negaron a LA NACION que se haya hablado de la reforma laboral, en la UIA dieron otra versión. Allí cuentan que, como opina la CGT, los empresarios prefieren un blanqueo a una moratoria y se lo hicieron saber a Triaca. Pero además hablaron del futuro. "Hay que pensar en el día después". Traducido: reclamarán reducir las contribuciones patronales, proyecto que también está en carpeta oficial. En Trabajo piensan incentivos desde las diferencias por tamaño y la localización geografíca.
Según contaron, Triaca afirmó que, gracias a la modificación del sistema de ART, ya se habían reducido reclamos judiciales y habían surgido nuevos actores: las mutuas de riesgo. También se habló de las multas que prevé la ley de empleo y la litigiosidad, y del próximo sector que tendrá mesa de productividad oficial: allí suenan los golpeados textiles.
Ya lo dijo el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana . "Todo apuro viene del diablo". Triaca habló de reformas, pero supeditadas a la baja del déficit. Lo mismo expresó ayer Nicolás Dujovne a las terminales que lo visitaron con Joachim Maier, presidente de Mercedes-Benz, a la cabeza. Habrá una reforma tributaria: el proyecto recién llegará en junio al Presidente y el año próximo al Congreso. Piden paciencia.
En las terminales se esperanzan con que los impuestos "distorsivos" sean revisados, y se llevaron ayer una promesa, según contaron. "Todos los que vienen le hablan de impuestos", se quejaron cerca de Dujovne, donde destacaron los brotes del sector en marzo. Nada de sorpresas en los discursos de ambos lados de la mesa chica.