Autos con piezas chinas en la negociación con Brasil
Kicillof pediría flexibilizar la norma que obliga a incluir 60% de autopiezas del Mercosur. El objetivo sería disminuir ese porcentaje para dar lugar a partes de origen chino y coreano.
Cuando este mediodía desembarquen en Brasilia, los ministros Axel Kicillof y Hector Timerman serán recibidos con la tradicional cordialidad brasileña. Pero difícilmente salgan grandes resultados de la cita que mantendrán con sus pares, el canciller Mauro Vieira y el titular de Desarrollo e Industria Armando Monteiro. La agenda tiene ribetes espinosos. Y es tanto por el tema a discutir: el nuevo régimen en el comercio bilateral de autos, que debe reemplazar al actual en junio próximo; como por las propuestas de Argentina.
De acuerdo a informaciones que manejan en el ministerio de Monteiro, Kicillof pediría flexibilizar la norma que obliga a incluir 60% de autopiezas del Mercosur. El objetivo sería disminuir ese porcentaje para dar lugar a partes de origen chino y coreano. Según el diario Folha de Sao Paulo, la ambición es abaratar los costos de producción y volverse más competitivos. El sistema vigente hasta ahora de 60% de partes Mercosur y 40% de origen importado ha favorecido a Brasil que se convirtió en el principal proveedor externo de componentes utilizados en los autos que se fabrican en territorio argentino.
Si esta iniciativa de Kicillof puede ser económicamente justificable, como forma de garantizar mejores precios para los mercados exteriores, no parecería que esto vaya a resolverse ni en esta reunión ni probablemente antes de que asuma el futuro gobierno de Argentina. Los funcionarios brasileños aspiran, como mucho, a prorrogar el acuerdo de comercio de autos y según dejaron trascender, en vista de las elecciones presidenciales de octubre próximo, mejor pasar cualquier cambio “estructural” en los convenios para el año próximo.
Lo que más conspira contra la eficacia de las negociaciones de hoy es el persistente retroceso del mercado brasileño de vehículos. Las ventas de autos en Brasil cayeron, en abril, 25% respecto de igual mes del año pasado. Esto tiene un reflejo directo en el nivel de despachos de autos argentinos hacia su socio principal: las exportaciones argentinas cayeron, en abril, 34% respecto de 2014. También es cierto que hubo una baja simultánea en las ventas brasileñas de autopartes hacia nuestro país: declinaron 23% en el período señalado.
Para los autopartistas brasileños no es un detalle: más de la tercera parte del mercado de exportación sectorial está en las terminales argentinas. Al revés es bien inferior: las empresas argentinas solo detentan 6% del mercado autopartista brasileño, en un pálido 6º lugar de un ranking que lideran Estados Unidos y China. La mini cumbre de hoy estaba, en cierto modo, prevista. Durante la visita de Mauro Vieira a Buenos Aires, en febrero último, habían arreglado un encuentro para mayo. Solo que en aquél momento se habló de “reuniones de la segunda línea”, es decir, en el nivel de viceministros y secretarios.